Una luz de advertencia del TPMS que se ilumina de forma fija y permanece fija generalmente significa que una o más llantas tienen la presión de aire baja y deben inflarse a la presión correcta que figura en la placa de presión. Sin embargo, una luz que parpadea durante 60 a 90 segundos y luego se ilumina fijamente indica que hay un problema con el sistema TPMS.
Es muy probable que uno o más sensores no se estén comunicando con el vehículo. Esto puede deberse a una variedad de problemas. La luz intermitente puede significar que el sensor está dañado, no hay sensor o la pila está agotada y es necesario reemplazarlo. También puede significar que se ha instalado un sensor incorrecto en la llanta.
Para asegurarse de darle el servicio adecuado al sistema TPMS, debe determinar cuál de estos es el problema. A continuación, se ofrecen algunos consejos adicionales que debe tener en cuenta cuando su cliente acuda a servicio: Revise los indicadores/MIL cada vez que el vehículo de un cliente ingrese a su área de servicio, y documente la presencia de cualquier luz encendida o parpadeante antes de realizar cualquier trabajo.
No olvide inspeccionar la llanta de repuesto si está equipada con un sensor TPMS. Cuando le de servicio al TPMS, inspeccione visualmente el vástago, la tuerca hexagonal, la junta y el tapón.
La mejor práctica recomendada es reemplazarlo con un nuevo kit de servicio. Informe siempre al cliente de los beneficios del TPMS, independientemente de que sea o no sea una oportunidad de venta.
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